Una vez que Hitler obtuvo el poder en Alemania y afirmó su régimen totalitario, llevó adelante una política agresiva para ampliar el territorio y la influencia alemana. En 1936 fortaleció al ejército y en 1938 anexó a Austria y ocupó parte de Checoslovaquia. En setiembre 1939 cuando invadió Polonia, Gran Bretaña y Francia le declararon la guerra.
La guerra enfrentó a los Aliados (principalmente Gran Bretaña, Francia, la URSS y Estados Unidos) con las Potencias del Eje (Alemania, Italia y Japón). Ambos bloques contaron con la colaboración de otros muchos países de los cinco continentes.
El conflicto se dividió en dos etapas: desde 1939 hasta 1943 las fuerzas del Eje dominaron la guerra, especialmente Alemania; a partir de 1943 los Aliados comenzaron a conseguir victorias. En junio de 1945 se derrotó a Alemania y dos meses después, Japón se rindió luego de que Estados Unidos utilizara la bomba atómica en las ciudades de Hiroshima y Nagasaki.
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